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Edoméx a “semáforo amarillo” 


El gobernador del Estado de México, Alfredo Del Mazo Maza, anunció a través de sus cuentas oficiales en redes 
sociales, sobre el retroceso en el semáforo epidemiológico que cambiaba a color amarillo, luego de la alza en la 
ola de contagios por COVID.19 y sus variantes de Ómicron y Delta. 
Al menos 24 horas antes del anuncio, el ejecutivo estatal, también refirió sobre el reciente estudio que 
confirmaba que había contraído el virus, y que determinaba su prueba positiva a COVID.19 con síntomas leves, 
pero que requerían de aislamiento de sus actividades. 
Desde el pasado 7 de enero del presente año, fuentes oficiales anunciaban el alza considerable de casos por Sars￾CoV-2, rompiendo cifras récord en los casi dos años de pandemia que ha afectado a nivel mundial a las 
sociedades. Tuvieron que pasar más de tres semanas, para que las autoridades del Estado de México, 
determinaran regresar a semáforo amarillo, como un acto de prudencia y concordancia, ante el peligro de salud 
que merma en la demarcación. 
A su vez, presidentes municipales que recientemente comenzaron actividades en las administraciones 2022-2024, 
compartieron que también han sido objeto de contagio por CORONAVIRUS; Lerma; Sultepec, San Antonio La Isla, 
Tenango del Valle, de entre otros, manifestaron encontrarse en buenas condiciones, pero con un aislamiento 
necesario y responsable, por lo que está ola de contagios, se muestra muy rebasada en comparación con otras 
ocasiones. 
Expertos en la materia han manifestado que el proceso de vacunación, así como la evolución del virus, ha 
mermado para que la afectación no sea tan agresiva como hasta hace algunos meses se mostraba, sin embargo 
las medidas de higiene, preventivas y de cuidados en general, no deben minimizarse, ante un contagio que está 
afectando tanto a adultos, como jóvenes y niños. 
Para diversos sectores del gobierno, principalmente de índole municipal, esta lamentable vuelve a hacer más 
complicados los procesos de respuesta y generación de resultados, pues las y los alcaldes entrantes, “reman” 
contra un inicio –ya de por sí- complejo, acompañado de una pandemia, que hace más lenta los procesos para 
aterrizar beneficios a sus representados. 
Por lo pronto, el proceso de aprobación de presupuesto en la cámara local, sigue frenado por la falta de 
acuerdos, y la pandemia y retroceso en el semáforo epidemiológico, podría ser una buena forma de acelerar o en 
su defecto, justificar lo lento de su ejecución.