Las campañas “tocan” su pico más alto
Editorial de la semana
La promoción político electoral ha rebasado la primer quincena de actividades proselitistas a nivel local y municipal, donde los diversos candidatos han llevado a cabo un sin número de caminatas y reuniones por demás austeras y de campo, en las que el utilitario y dádivas, en sus diversas formas, pasaron a ser plato de segunda de mesa, producto de las limitantes impuestas por el Instituto Nacional Electoral (INE), así como la austeridad a la que se enfrentan por disposición propia.
Sin duda, la pandemia por COVID-19 ha sido un factor en el desenvolvimiento de las prácticas electorales, por lo que muchos participantes han optado por limitar su presencia en las diversas reuniones o eventos que se desarrollan, por la simple cuestión de cuidar de su salud y la de sus familiares; hecho que sin duda también influirá en la participación estimada para el próximo 06 de junio, al grado que varios candidatos asumen que si la ciudadanía no participa en el proceso de campaña, mucho menos lo hará el día de la votación.
Por otro lado, los abanderados de las diversas expresiones políticas, han optado por conseguir la simpatía ciudadana de mano directa, sin algarabía ni excesos; estas campañas, han retornado a lo que verdaderamente era la promoción política: llegar de casa en casa a buscar que la gente se sume a un proyecto, con base en la oferta política que cada uno de los aspirantes promueva, muy por encima de las regalías que pudieran ofrecer; incluso, yendo contra la corriente de un sector que se mantiene en “cuarentena”.
De manera constante, los diversos contendientes han denunciado acoso hacia los ciudadanos, por parte de las personas que tienen el control de la promoción y repartición de programas sociales (estatales o federales), cuestión que - quince días de las elecciones-, podría mermar la participación social en diversas regiones, por el condicionamiento de apoyos, que van desde el “Salario Rosa” hasta las becas “Benito Juárez”.
Sin duda, la elección considerada como la más grande e importante en la historia del país, pese a desarrollarse en un ambiente de “intermedia”, bajo un ánimo de pandemia y austeridad, ha elevado los ánimos con miras al gane electoral; aunque no se vislumbra un partido político dominante, pues la fuerza que ha perdido Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) se ha hecho más visible con la alianza PRI-PAN-PRD, que pese a su incoherencia, es un “monstruo” estructural; sin dejar de lado los partidos con tendencia a crecer, como son el PVEM y MC.
El auge de las propuestas en tiempos de campaña, se encuentran en su máximo nivel, por lo que los avances y anuncios que se den en estos días, podrían influir para definir los ganes en diversas zonas del Edoméx, con escasos 15 días previos al cierre de la contienda...
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